lunes, febrero 01, 2010

Cumpleaños de un grande


Hoy Gabriel Batistuta cumple 40 años. Para un futbolero, y además argentino, no se trata de un dato menor. Bati es el máximo goleador histórico de la selección (hizo 56 entre 1991 y 2002) y quien más goles consiguió vistiendo la blanquiceleste en torneos mundiales.

Pero más allá de la contundencia estadística, lo que quiero recordar aquí es que su fenomenal capacidad goleadora determinó que, durante su vigencia, la cobertura del puesto de delantero central no admitiera la menor discusión (algo que, tratándose de la selección, es por lo menos asombroso): a lo sumo, se debatía sobre quién debía acompañarlo en el ataque. De esto podría hablar bastante otro gran goleador, Crespo, condenado a ser su muy eficaz suplente debido a que tanto Passarella como Bielsa nunca quisieron siquiera probar que jugaran juntos. Una lástima.

En el Mundial de 1994 formó parte de un fenomenal equipo del que participaban las mejores versiones de Caniggia y Balbo, otros dos grandes delanteros, y la ya desteñida pero aún poderosa de Maradona, cuya inconducta profesional (una de tantísimas...) determinó el fracaso cuando estaban dadas las condiciones para pretender el título.

Recuerdo cuando antes del torneo de 1998 se generó una absurda polémica entre el DT Passarella y el volante Redondo en torno a... la longitud que debía tener el cabello de los jugadores. La fatuidad del carilindo jugador del Real Madrid y la estúpida rigidez del "coach" contrastaron entonces con la sencilla lógica futbolera de Batistuta, que declaró que "si para jugar en la selección me tengo que recortar un poco el pelo, lo hago, no hay ningún problema". Si eso no es amor por la camiseta...

Dejo al pie el enlace a un video con goles que hizo, en su mayoría, con la Fiorentina. Los hay para todos los gustos: de cabeza, de tiro libre, de derecha y de zurda, definiendo con voleas de primera o con toques sutiles, entrando al área apareado con defensores (hay uno contra el Milan, con sombrero a Baresi incluido) o pateando desde 35 metros. Un fenómeno, un rompe-redes, un cappocannionero. Que lo disfruten.

Batistuta spectacular goals.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo tenía alrededor de ocho años cuando me empezó a gustar el fútbol de verdad. En casa no se veía mucho fútbol de afuera. Para mí las estrellas eran los que le gustaban a mi viejo del torneo local, o los que brillaban con la selección (no veíamos fútbol internacional, pero no dejábamos pasar ninguno de Argentina, ni siquiera a las 5 de la mañana). Recuerdo siempre esa selección de Basile, con la que forjé mi amor incondicional y para toda la vida con la selección. A partir de ahí, Batistuta se convertiría en el primer ídolo absoluto de mi infancia y primera juventud. Me emociono cuando veo sus goles, y me encanta su actitud. Es un tipo humilde que siempre dejó de lado el rocanroll del ambiente.
Un verdadero luchador, con amor propio, y por la camiseta. Unos huevos así de grandes, Bati.
Te mercías sacarnos campeones!
Salud!

Mastrocuervo dijo...

Eso es, el Bati mereció sacarnos campeones, no pudo ser...

Ambos sabemos de qué hablamos, Anónimo...

ars dijo...

Tal cual, Mastro. Y en verdad fue una lástima.