martes, mayo 27, 2008

Perdiendo el tren


El interminable conflicto campo vs. gobierno nos tiene hartos a todos. Sus efectos no sólo se están sintiendo en la economía -cuyo desempeño depende de algo tan inasible, etéreo y frágil como la confianza- sino, lo que es peor, sobre el ánimo de la gente común.

Subo al taxi y el chofer, al escuchar el flash informativo, me mira por el espejo con cara de "!Qué barbaridad!". Después voy al super, me detengo un momento ante la tele para ver el rostro hierático del jefe de gabinete en la pantalla, y la señora que está a mi lado me mira con pena como diciendo "¿Hasta cuándo?".

Los involucrados no parecen capaces de bajar los decibeles. Recién hoy los ruralistas han pedido un poco de calma, solicitud que supongo también harán a sus bases. Pero el pejotismo ha sido convocado por su jefe, en un gesto que parece presagiar más diatribas de (el ex jefe de gabinete de Duhalde, hoy kirchnerista puro y duro) Capitanich, más hallazgos metafóricos de Aníbal F., más acciones punitivas de D'Elía contra la puta oligarquía.

El mundo, quizá deleitándose por el exito que su gigantesca campaña en nuestra contra está teniendo, nos contempla con una mezcla de incredulidad y escepticismo.

Brasil hace rato que tomó el tren que nosotros dejamos escapar.

¿Será posible que los argentinos estemos a punto de desaprovechar otra oportunidad? ¿Es que no podemos sustraernos a la impronta de elegir, siempre, el camino equivocado?

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Sr, Por qué dice que nos tienen hartos a todos? A mí no. Yo no entiendo mucho pero me parece que lo que esta ocurriendo es un gran deporte nacional,¿puede ser?
Por que estamos por desaprovechar otra oportunidad? Qué oportunidad? y Por qué elegimos caminos equivocados?
Por favor ruego me explique.
Además no entendi ese articulo que vincula.
Abuelo Lelo

Mastrocuervo dijo...

Abuelo Lelo,ud. es muy preguntero y yo no soy expliquero.

Anónimo dijo...

Buenas tardes. Creo que el principal error del gobierno nacional, tanto el de Néstor Kirchner como el de Cristina, es que no supieron ni saben todavía aprovechar la inmejorable oportunidad de la Argentina. Como han dicho algunos analistas políticos y económicos, la Argentina no creció ni crece por obra y virtud de los K, sino porque existe un contexto internacional caracterizado por la incorporación de millones de chinos e hindúes al capitalismo. No son muchos los millones que empiezan a vivir en el capitalismo en comparación con los que podrían incursionar, ya que en China, por ejemplo, solamente 300 millones viven en el capitalismo, en tanto que hay otros mil millones que viven bajo el tradicional comunismo. Por lo tanto, es muy probable que, más tarde o más temprano, esos mil millones entren al capitalismo, que es solo cuestión de tiempo. Estos millones de habitantes necesitan alimentos, por lo que ciertas materias primas han sufrido un incremento sumamente importante de su precio internacional, como la soja, cuyo gran demandante es China. Con los precios actuales de la soja, hasta De La Rúa hubiera hecho de la Argentina un país con gran crecimiento. Sería importante hacer un pequeño análisis sobre la cantidad amplia de elementos que están desaprovechando los Kirchner, producto, por ejemplo, de las retenciones, la suspensión de la exportación de carne vacuna, que generó falta de confianza en muchos mercados en la Argentina, lo que derivó en que países como Brasil y Uruguay, que no es históricamente productor de las materias primas que producía la Argentina, en el primer caso, y, en el segundo caso, que no es comparable en cantidad de habitantes; están ganando y, sobre todo, aprovechando una gran oportunidad, que la Argentina no hace, lo cual podríamos decir que está hipotecando su futuro, ya que tantos cambios y divergencias cercanas en el tiempo, inducen a muchos países a no comerciar de manera significativa con este país, simplemente porque no saben cuál va a ser la situación que genere el gobierno nacional. La suspensión de exportación de carne vacuna no significó una ronda de consultas con los sectores vinculados a la ganadería vacuna, sino una simple resolución ministerial, o, a lo sumo, un decreto, que restringió de una manera absurda el derecho de comerciar que tiene, o debería tener, toda persona que viva en la Argentina. En fin, no tengo la sensación que vaya a haber un cambio en amplios sectores de la población. Creo que muchos adoran a los K por una confusión sumamente grave, que es la de creer que el crecimiento es por obra y virtud de los K. En todo caso, debemos hacerle un monumento a China e India que lograron insertar ciertos sectores de su población al capitalismo. Muchas gracias. Mario Javier Casabona Guerra.